El PSN iniciará este lunes, previsiblemente, su anunciada ronda de contactos para conocer de mano de los partidos su postura de cara a una posible moción de censura. Se trata de una nueva vuelta de tuerca de los socialistas navarros, que tras la reunión de su Ejecutiva del sábado no desvelaron su posición sobre una posible moción de censura.
De momento, lo único anunciado por la dirección del partido que lidera Roberto Jiménez es que no citarán a Bildu a estos encuentros, partido cuyos votos son necesarios para poder aprobar la moción de censura. Se trata de una forma de dilatar la situación debido a que el desencuentro entre Ferraz y la dirección de Navarra sigue latente sobre cómo actuar en la Comunidad foral.
Las direcciones del PSOE y del PSN han intensificado este fin de semana su interlocución al objeto de definir con absoluta precisión una hoja de ruta para sacar a la Comunidad Foral de la crisis institucional que soporta como consecuencia de la negativa de Yolanda Barcina a dimitir, tal como le exige la mayoría del arco parlamentario. Precisamente, la coincidencia en que la presidenta foral debiera asumir su responsabilidad y adelantar las elecciones, ante la situación de desgobierno dada su incapacidad para concitar los apoyos necesarios, sustenta el diálogo permanente entre la cúpula federal y la navarra.