Últimas noticias

Dos ex jefes de ETA se enfrentan a 675 años de cárcel por atentado cometido en 2008

Dos ex jefes de ETA se enfrentan a 675 años de cárcel por atentado cometido en 2008
Casa cuartel Calahorra (ABC)
Casa cuartel Calahorra (ABC)

Los antiguos cabecillas del «aparato militar» de ETA Arkaitz Goikoetxea y Jurdan Martitegi se enfrentan desde hoy a una pena de 675 años de cárcel por participar en el atentado perpetrado en marzo de 2008 contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Calahorra (La Rioja), donde residían 33 personas. La Fiscalía les acusa de la comisión de 33 asesinatos terroristas en grado de tentativa, uno de estragos, otro de tenencia de explosivos, dos delitos de detención ilegal y otro de robo de vehículo a motor.

ETA cometió este atentado apenas dos semanas después de asesinar a tiros al exconcejal del PSE Isaías Carrasco en el portal de su vivienda en Mondragón (Guipúzcoa). La casa cuartel de Calahorra ya sufrió un atentado similar en 1983, sin que hubiera que lamentar víctimas mortales. El fiscal Carlos Bautista considera que Arkaitz Goikoetxea, «Dulantzi», y Jurdan Martitegi, «Arlas», formaban parte en febrero de 2007 del comando ‘Askatun Haizea’, junto a Asier Borrero e Iñigo Gutiérrez Carrillo.

Según el escrito de conclusiones provisionales, el ‘comando’ decidió el 21 de marzo de 2008 colocar un coche-bomba frente a la casa cuartel de Calahorra, para que hiciera explosión a las 14.00 horas. El artefacto estaba compuesto de dos barriles de cerveza de unos 50 litros cada uno con explosivo amonitol. Los terroristas fabricaron la bomba en un piso de Ezcaray y lo trasladaron en una furgoneta, en la que se encontraron rastros genéticos de Goikoetxea, hasta Álava. Allí, hicieron una parada esperando al paso de algún vehículo para utilizarlo en el atentado. Siguiendo esta estrategia, los etarras retuvieron a una pareja que se preparaba para una jornada de senderismo, les encañonaron y retuvieron, maniatados con bridas y con los ojos cerrados, mientras cargaban su Honda Civic de explosivos.

Martitegi condujo dicho vehículo hasta la casa cuartel, mientras Gutiérrez realizaba labores de lanzadera y Goikoetxea y Borrero custodiaban a la pareja detenida, que fue liberada a las 14.20 horas. Aparcado el coche-bomba, Goikoetxea avisó a la DYA de Álava y a los bomberos de Calahorra, lo que sirvió para desalojar a duras penas. El edificio albergaba a 33 personas, de las cuales al menos 23 eran guardias civiles. El ataque dejó siete heridos y causó daños superiores a los 4,7 millones de euros en inmuebles y vehículos estacionados en la zona.

About The Author

Otras noticias publicadas

Responder

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies