El 60% de los navarros tendría problemas de movilidad en su edificio y el 64% en su vivienda si fueran en silla de ruedas
El informe “La Voz de la Accesibilidad” muestra los problemas a los que se enfrentan cada día los más de 270.000 mayores con movilidad reducida que residen en España.
Más de la mitad de los navarros (60%) tendrían dificultades para desplazarse en silla de ruedas por las áreas comunes del edificio en el que residen, mientras que un 64% tendría problemas para moverse dentro de su vivienda. Así lo recoge el informe “La Voz de la Accesibilidad”, elaborado por la Fundación Mutua de Propietarios con el objetivo de mostrar el día a día de los más de 2,4 millones de españoles con movilidad reducida, de los que 270.000 (un 11%) son mayores de 65 años.
Unas barreras arquitectónicas que, para un 72% de los navarros, serían difíciles de solventar por la complicación que supone poner a todos los vecinos de acuerdo, especialmente si la inversión en obras de rehabilitación supera los 2.000€ por vecino.
“La movilidad reducida es uno de los principales problemas de la tercera edad y, por ello, es esencial que las comunidades de propietarios sean conscientes de la necesidad de hacer accesibles los edificios para facilitar la vida de los mayores, contribuyendo a crear una sociedad más inclusiva”, destaca Cristina Pallàs, directora de la Fundación Mutua de Propietarios.
Para este colectivo, las dificultades para transitar libremente no solo aparecen en los espacios comunes de su bloque o vivienda. Acceder a edificios públicos, cruzar pasos de peatones, moverse en transporte público o, incluso, caminar por las aceras, son acciones que también entrañan una gran dificultad. Por ello, la accesibilidad de los municipios españoles es calificada con un suspenso (4,7) entre quienes tienen problemas de movilidad.
De acuerdo con el informe “La Voz de la Accesibilidad”, para los navarros, los accesos a edificios públicos son los mejor valorados en materia de accesibilidad (6,6), ya que muchos cuentan con rampas o ascensores, seguidos por los pasos de peatones (6,4), y el transporte público adaptado, valorado con un 5,8. Finalmente quedan las aceras (5,4) por su falta de amplitud y su deficiente estado.
No obstante, es destacar que cuatro de cada cinco navarros no se plantean cambiar de lugar de residencia por estos motivos, ya que consideran que el resto de las localidades se encuentran en la misma situación en materia de accesibilidad.
El informe de la Fundación Mutua de Propietarios explora también cómo los navarros perciben el día a día de las personas con movilidad reducida. En este sentido, hacer deporte (85%), viajar (85%), subir al transporte público (60%), hacer la compra (75%), o llevar a cabo las tareas cotidianas (60%) son las acciones que consideramos que entrañan más dificultad para realizar en silla de ruedas.
“La accesibilidad no debería ser un lujo, sino una herramienta para que todos puedan participar plenamente de la sociedad”, concluye Cristina Pallàs.