No debería sorprender a nadie que la ministra Nadia Calviño, ministra del Gobierno Sánchez-Iglesias, no haya sido elegida para presidir el Eurogrupo.
Una ministra que comparte cartera con comunistas-populistas no puede ser elegida para la todo liberal Unión Europea. Además, tiene un presidente que ha engañado, una vez más, a los españoles. Tanto hablar de pactos con el principal partido de la oposición, el PP, para reconocer que nunca ha querido pactar con ellos. Bueno lo mismo dijo de Podemos e Iglesias, por activa y pasiva, y hoy gobiernan juntos.
No queda nada bien España en la UE. Cada día que pasa su capacidad de liderazgo es menor y su posición como potencia europea disminuye.
Pedro Sánchez no ha calculado bien su estrategia, aunque, pensándolo bien, ¿qué estrategia puede tener un gobierno que comparte poder con aquellos que quieren romper el sistema? ¿No será que el socialismo quiere romperlo también?
Antecedentes existen.