Las declaraciones de la viróloga Margarita del Val ponen los pelos de punta sobre el peligro que puede suponer pecar de optimismo con la pandemia de coronavirus. Decir que se están levantando las restricciones porque los españoles no pueden aguantar más y que ello va a provocar rebrotes aún más difíciles en el futuro, resulta cuando menos inquietante.
Si eso fuera así, la población de este país estaría sufriendo una gigantesca manipulación tendente a considerar que todo ya ha pasado cuando, más bien todo no ha pasado, sino que no ha hecho mas que empezar
Cuando sólo les preocupa y ocupa continuar en estado de alarma; cuando se indica salir a la calle en horas y tiempo determinado produciéndose grandes aglomeraciones; cuando se quiere abrir los negocios, comercios, bares, restaurantes y que todo sea aparentemente normal, los expertos parece que no están de acuerdo
¿Corremos un peligro aún mayor? ¿Qué está haciendo el Gobierno?