Hallado en Israel, cambia el relato sobre nuestra especie
El Homo sapiens surgió de África hace unos 200.000 años pero saber cómo y cuándo empezó su dispersión por el resto del mundo es un complejo puzzle que se va construyendo conforme van apareciendo nuevas pruebas. Ahora, el fósil más antiguo hallado fuera de África, en una cueva israelí, demuestra que el hombre moderno salió del continente africano al menos 60.000 años antes de lo datado.
El estudio paleoantropológico del fósil, liderado por Israel Hershkovitz, de la Universidad de Tel Aviv, y realizado en colaboración con investigadores del Centro UCM-ISCIII de Evolución y Comportamiento Humanos, del Centro Nacional de Investigación y Evolución Humana (CENIEH), y del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES), se publica hoy en la revista Science, sugiere que los sapiens, después de surgir en algún lugar del continente africano, lo abandonaron al menos 60.000 años antes de lo pensado, lo que concuerda con lo que estudios genéticos previos ya habían apuntado. Science.
“Misliya es un descubrimiento apasionante”, asegura en un comunicado de prensa Rolf Quam, del Departamento de Antropología de la Universidad de Binghamton (SUNY) en EE.UU e investigador del equipo de Atapuerca.
“Proporciona la prueba más clara hasta el momento de que nuestros primeros ancestros emigraron de África mucho antes de lo que pensábamos. También implica que los humanos modernos se encontraron e interactuaron durante mucho más tiempo con otros grupos humanos arcaicos, lo que proporcionó más oportunidades para el intercambio cultural y biológico”, añade.
Cuándo comenzaron a emigrar los primeros humanos modernos de África y qué rutas tomaron en su expansión por el mundo son claves para entender la evolución de nuestra especie. En ese sentido, la región de Oriente medio representa un corredor importante para las migraciones de esos primeros homínidos durante el Pleistoceno.
“Israel está en Asia, pero tiene frontera con Egipto, por tanto está pegada a África. Por tanto, tampoco es ampliar mucho el área de distribución. Este es el Homo sapiens más antiguo y osado que hemos encontrado, pero de hecho apenas se asomó fuera de África. Ahora bien, ¿hasta dónde llegaron esos primeros humanos modernos? ¿Se quedaron aquí o avanzaron hacia Asia? De momento no tenemos respuestas para estas preguntas. Aunque lo que sí está claro, al menos para mí, es que la expansión realmente importante es la que se produjo hace 60.000 años. Aquellos Homo sapiens fueron los que llegaron a Europa. Y nosotros descendemos de ellos”, explica Arsuaga.