El entrenador de Osasuna, Diego Martínez, afirmó que respetó la decisión del árbitro de suspender el partido por la nieve, aunque el club navarro «hizo todo lo posible por jugar», pero dijo que no entendió la falta de acuerdo con el Nàstic para jugar el encuentro este fin de semana.
«No estoy enfadado. Queríamos jugar. Hemos hecho todo lo posible por jugar y creo que debíamos haber empezado el partido a la hora prevista. Nuestros operarios se han hinchado de trabajar todo el día», declaró.
El técnico vigués destacó que intentaron jugar «por todos los medios para preservar la integridad física de los jugadores» y negó que hubiera placas de hielo en el campo como apuntó el entrenador del Nàstic, Antonio Rodríguez ‘Rodri’.
«Hemos ofrecido la posibilidad de jugar mañana y tampoco ha podido ser. Me preocupa cuándo se puede ubicar este partido dentro del calendario», dijo.
«Entiendo que no se pueda jugar, pero no que no se busque una solución porque podíamos haber jugado mañana sábado o el domingo y ahora va a ser un problema para todos», añadió.
Preguntado por si en la decisión del Nàstic podía influir las bajas con las que afrontaba el partido, afirmó: «Me limito a dar nuestra opinión. Hemos hecho todo lo posible por jugar y también por la gente que ha venido», más de 9.000 aficionados que se enteraron por megafonía a las 21.41 de la suspensión del partido.
Diego Martínez dijo que al menos el partido tenía que haber comenzado a la hora prevista: «Me ha sorprendido el retraso. El balón rodaba. Después ha caído más nieve y respeto la decisión del árbitro, pero precisamente como es por la integridad de los jugadores vamos a hacerlo mañana y bien».
«Queríamos jugar hoy y hemos hecho todo lo posible. No vamos a gastar más energía. Estamos a viernes y pudiéndolo jugar el fin de semana era una solución válida y nos teníamos que haber puesto de acuerdo», incidió.
Por último, comentó que espera que esto sirve para «aprender» que ni en Pamplona «se puede jugar a las 9 de la noche» en invierno ni «en Andalucía a las 4 de la tarde» en verano. «Es la misma situación», finalizó. EFE
