El presidente de Rusia, Vladímir Putin, aprobó por decreto una nueva doctrina sobre la seguridad de la información, que denuncia casos frecuentes de «abierta discriminación de los medios rusos en el extranjero».
El documento, de 16 páginas, publicado hoy en el boletín digital gubernamental, subraya que últimamente ha aumentado la presión informativa sobre la población del país, en particular, sobre la juventud, con el propósito de «socavar los valores espirituales y éticos tradicionales rusos «.
Según recoge la agencia oficial rusa TASS, la nueva doctrina proclama como objetivo estratégico la construcción en el espacio informativo de un sistema de relaciones internacionales cordiales y no conflictivas.
A este respecto, cita la necesidad de evitar conflictos armados provocados por el uso de tecnologías de la información. “Los servicios secretos extranjeros recurren a la presión psicológica e informativa para desestabilizar la situación en distintas regiones del mundo”, lamenta la nota.
En otro párrafo, el documento denuncia los crecientes ciberataques de Estados extranjeros a instancias militares rusas. “Crece la amenaza del uso de las tecnologías de la información con el fin de dañar la soberanía, la integridad territorial y la estabilidad política y social de la Federación de Rusia”, prosigue.
El pasado viernes, el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, por sus iniciales en ruso) denunció una ofensiva cibernética contra el sistema bancario del país. Los ataques informáticos se realizaban desde centros situados en los Países Bajos y pertenecientes a una empresa ucraniana llamada Blazing Fast.