La existencia de dos facciones en el mundo musulmán, la sunita y la chiíta, debería ser aprovechada por el mundo occidental para frenar el grave peligro que supone el mal llamado «estado Islámico».
Las declaraciones que hoy ha llevado a cabo el presidente de la República de Irán, en el sentido de que una vez resuelto el tema nuclear- durante muchos años, este pais ha sufrido duras sanciones económicas, por su intento de conseguir armas nucleares-, se puede abordar el tema de la lucha contra el terrorismo internacional, son un factor a tener en cuenta. Recuérdese que Irán profesa el Chiísmo, contra el que luchan también, los terroristas de EstadoIslámico (EI), puesto que ellos son Suníes y consideran a los iraníes, infieles, contra los que hay que luchar.
El grupo yihaidista EI es de hecho un enemigo muy peligroso en el mundo. Esta atacando ya a Turquía , estado miembro de la OTAN, con las connotaciones que esto tiene. Imaginénse un ataque masivo hacia este país. Todos nos veríamos inmersos en una guerra; Siria, medio país, esta en sus manos. Entrar en contacto físico con el Estado de Israel, seria un problema muy grave a nivel mundial.
Cualquier oportunidad por tanto, para ganar aliados contra EI, nunca debería venir mal.