

Las vueltas que da la politica internacional son muchas veces sorprendentes. Uno de los grandes enemigos que tenia EEUU en Oriente Medio, Irán, es ahora aliado. Todos recordamos la caida del Sha en los años setenta y la llegada de Jomeini; todos recordamos la crisis de los rehenes en la enbajada estadounidense; la guerra irano/iraquí: la guerra del Golfo; la financiación de terroristas: la crisis nuclear y un largo etcétera.
La aparición del horror de Estado islàmico, hace olvidar afrentas pasados y recupera amistades.
Hoy todo cambia. Un enemigo mayor que pudiera desestabilizar al mundo entero lo provoca.
Si la Iglesia católica, la gran amenazada por estos nuevos bárbaros responde no poniendo la otra mejilla, sino dando por buena la guerra, deberia alertar y unir a todos, para imponerse contra esta amenaza, que utiliza el Corán, libro sagrado, para asesinar, esclavizar y romper lo moralmente establecido.