Los abogados dicen que «nunca» habían visto un extravío igual. UPyD habla de «conspiración o mano negra»
PyD e Izquierda Unida entregan de nuevo este viernes en el Juzgado de Instrucción 32 de Madrid la documentación relativa a los borrados por parte del PP de los ordenadores del extesorero del PP Luis Bárcenas, para que la causa pueda reconstruirse tras haberse extraviado el sumario.
Los letrados Enrique Santiago, en representación de IU, y Jorge Alexandre, por parte de UPyD, han coincidido en señalar que la causa podrá reconstruirse y han confiado en que, una vez formalizado este trámite, la Audiencia Provincial acepte los recursos que presentaron contra el archivo de las diligencias que se decretó en 2013.
También han coincidido en que «nunca» en sus respectivas carreras se habían enfrentado a la pérdida de la documentación de una causa, y han subrayado que en este caso se trata además de un asunto de corrupción en el que el PP reconoció que había borrado los ordenadores de su extesorero.
UPyD habla de «conspiración o mano negra»
El abogado de UPyD ha precisado que la pérdida de la documentación ha podido deberse tanto «a una teoría de la conspiración o de la mano negra, que no es descartable», aunque también puede ser la consecuencia de la «nefasta» situación de los juzgados españoles.
El extravío del sumario sobre los borrados por parte del PP de los ordenadores de Bárcenas fue advertido por UPyD cuando preguntó por el recurso de apelación que habían interpuesto ante la Audiencia Provincial de Madrid contra el archivo de esta investigación por parte del juzgado 32.
Su titular consideró entonces, en octubre de 2013, que la destrucción de los discos duros de los dos ordenadores que Bárcenas tenía en la sede del PP no era constitutivo de delito de daños ni encubrimiento.
Para solventar la pérdida, la magistrada dictó una providencia emplazando para este viernes a las partes para que aporten toda la documentación que tengan en su poder con el objeto de reconstruir la causa, además de dirigirse también al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, que fue el que remitió la causa a los juzgado de Plaza de Castilla
.
