En medio del conflicto con Trump, el camarada Maduro decretó el comienzo del período navideño el 1 de octubre. A este lado del Atlántico, el alcalde de Vigo se le adelantó al empezar a poner las luces en agosto. Mientras, las poco bolivarianas cadenas de distribución (no importa que sean grupos franceses, alemanes, vascos o valencianos), se han impregnado del mensaje y, en menos que canta un gallo, nos han plantado los anaqueles repletos de mazapanes, polvorones y mantecados, junto con los tradicionales turrones y las nuevas versiones chocolateadas, en la primera semana de octubre.
A los productos típicos de nuestra tierra, les acompañan, ya adaptados como nuestros, las distintas variantes de Panettone. Y en breve aparecerán los Roscos de Reyes con sus múltiples rellenos. Carlos Alsina iniciará el debate de si el tradicional postre de Reyes debe llevar fruta escarchada o no. Ahora que está de moda, algún respostero espabilado sacará uno con sabor a chistorra,. Presumo que de Ferraz le llegará un gran pedido.
Por ello, imbuido de este espíritu adelantado les quiere felicitar las fiestas. Pues, ahora entiendo y comprendo el empeño de muchas personas en felicitarlas de esta manera. No me extraña. Y es que de desde el 1 de octubre hasta Navidad me salen las siguientes fiestas, casi en un trimestre se juntan la mitad de los 14 festivos anuales.
Empezamos con una ya olvidada. Los nostálgicos, la recordarán. Aunque a nuestro presidente, con todo lo que le gusta hablar de Franco se le ha pasado. El pobre con el jaleo que tiene con Begoña y su master, las saunas de su suegro, su hermano (que no sabe donde tiene la oficina, ni cual es su cometido laboral) y sus amigos del Pegueot (uno en chirona y los otros a punto de entrar), se ha olvidado de su día, el del Caudillo, el 1 de octubre.
Y ahora, ya en serio, y con el calendario festivo en vigor. Tenemos el 12 de octubre, día del Pilar, patrona de España y día de la Hispanidad. Aunque este año cae en domingo y sólo 5 autonomías han decidido pasarlo al lunes 13. Aunque me temo que seguiremos con la murga de todos los años, de la colonización y el genocidio, palabra de moda, que cometieron los conquistadores extremeños, sin olvidarnos de los vascos, que también pasearon por Nueva España, Tierra Firme y desde Florida hasta California. Nos olvidaremos de las Universidades fundadas y de las misiones con su sistema adelantado de economía social. Y de tantos otras cosas positivas como que a los indígenas se les considero personas y por tanto súbditos de la corona (Asunto que los civilizados ingleses nunca hicieron). Aunque siempre hubo quien quiso robar y engañar, retorciendo las leyes para medrar. Nada que no pase en la actualidad. Hoy lo llamamos irregularidades. Hay que ver como cunden las tardes de clase de economía en Ferraz.
Llegamos a noviembre, que comienza con el Día de los Fieles Difuntos. Aunque hoy en día lo que se lleva es la versión mercantilizada y superflua, conocida como Halloween (también han comenzado a decorar los establecimientos). Pero esta fiesta merece un artículo monográfico.
Mientras en algunos pueblos se celebrarán las ferias de San Martín (a todo cerdo llega su …) y de San Andrés. Eso si las animalistas no las boicotean como a la Vuelta ciclista. La matanza es algo arcaico y de personas salvajes. Aunque muy pocos le hacen ascos al jamón, jamón. El doble rasero que se lleva en el momento presente.
Sin comerlo ni beberlo, llegamos a los puentes de diciembre con el día 6 de la Constitución y el 8 con la Inmaculada. En Navarra los empezamos con el día 3 San Francisco Javier, día de la Comunidad. Y en Pamplona, vamos más espabilados, el 29 de noviembre arrancamos el acueducto foral con el copatrono de la ciudad, San Saturnino. Con semejante esfuerzo en infraestructura vacacional, es normal que no nos llegue para el resto de las necesarias obras públicas. Ya saben, terminar el canal de Navarra, concluir el trazado del AVE, la esperada nueva estación de ferrocarril, … Para abrir boca este año está en obras el Paseo Sarasate.
Y por fin la Navidad. Ahora entiendo esa costumbre de felicitar las fiestas, en vez de la Navidad. Mas estén tranquilos, que cuando sea el momento les desearé Feliz Navidad. Eso, si no me adelantan los Sanfermines. Va a tener razón aquel amigo de la juventud, Katxo le llamábamos por su hermano que era zurdo, que en Navidades te felicitaba el San Fermín y en Sanfermines te regalaba turrón al felicitarle las Pascuas. Un adelantado al tiempo. Todo un visionario.
Jesús Bodegas Frías, Ldo. en Ciencias Biológicas.

