Si todo un tribunal de justicia cita a declarar a los redactores y responsables del programa impuesto por el gobierno nacionalista de Navarra, llamado SKolae, es que tendrá sospechas o por lo menos querrá ver si son ciertas las acusaciones que se han vertido contra él.
Recuérdese que este programa lo que pretende, entre otras cosas, es «adoctrinar» a los escolares sobre cuestiones de la llamada ideología de género y desde su más temprana edad.
El actual gobierno en funciones de Navarra debería paralizar dicho programa hasta que la judicatura dictará justicia. Que más de 100 colegios en Navarra lo estén impartiendo en contra de su voluntad y de la mayoría de la población no deja en buen lugar a este Gobierno.
Un Gobierno más preocupado por cuestiones nacionalistas o por cuestiones de adoctrinamiento que por la búsqueda del bienestar de su población, ve como muchas de sus propuestas son llevadas a la Justicia y como muchas de ellas son rechazadas.
Queda claro, por tanto, que su estrategia adoctrinadora en todos los campos no funciona y los ciudadanos, hoy por hoy, tras cuatro años de nacionalismo, así lo han corroborado en las urnas el pasado domingo 26 de mayo.