El proceso consiste en la creación de organoides, es decir, de modelos miniaturizados de un órgano que se desarrollan en el laboratorio y que permiten conocer mejor cómo se desarrolla una placenta en la gestación.
De este modo, se podrán estudiar muchos trastornos que se producen durante ese proceso como la preeclampsia, la restricción del crecimiento y la muerte fetal, que tienen su origen en un crecimiento anormal del feto dentro de la placenta durante el primer trimestre. EFE