La Asociación de Consumidores Irache ha apreciado que los discapacitados disponen más facilidades para acceder al bono social de electricidad, que supone un descuento del 25 % al 40 % sobre la tarifa de último recurso de electricidad, aunque quienes quieran seguir disfrutando de él tienen que renovarlo.
Así lo advierte en una nota, en la que explica que en octubre del año pasado, un Real Decreto estableció las nuevas condiciones y requisitos del bono social de electricidad, un mecanismo de protección para los consumidores más vulnerables, entre los que se encuentran pensionistas, discapacitados, y familias numerosas.
Los consumidores que en aquel momento estaban disfrutando del bono social, tenían de plazo hasta abril de este año para renovarlo.
Sin embargo, a falta de un mes para finalizar el plazo, la gran mayoría de los consumidores acogidos a este beneficio no lo había renovado todavía, y muchos de ellos se estaban encontrando con dificultades para cumplimentar los formularios.
Ante esta situación, el Ministerio ha decidido prorrogar hasta el 8 de octubre de 2018, el plazo que tienen los consumidores para renovarlo. Asimismo, se han implementado medidas para que sea más sencillo solicitarlo.
Desde Irache observan que «muchos pensionistas y discapacitados no solicitan el bono social, bien porque no saben que existe, bien porque desconocen los requisitos exigibles para su aplicación».
En este sentido, insisten en que aquellos consumidores que tengan, o en cuya unidad familiar exista una persona con una discapacidad reconocida igual o superior al 33 %, el requisito general de ingresos mínimos se eleva en 0,5 puntos, permitiendo que más personas de este colectivo puedan acceder a él. EFE
