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Fausto Tienza realizó otra muestra de sacrificio al servicio del equipo en su encuentro de ayer ante la Real Sociedad. Esta mañana, tras el entrenamiento matinal, atendió a los medios de comunicación para explicar cómo se encuentra el vestuario tras la derrota en Anoeta. «Puedo venir aquí y decir que estamos bien. Pero ayer me costó dormir, igual que a mis compañeros y al resto del osasunismo. Pero sí que es verdad que me contagio del osasunismo, del Osasuna nunca se rinde. Mañana saldrá un poquito más el sol y el miércoles ya tendré ganas de morir el fin de semana en El Sadar. Lo bueno de Osasuna es eso, que te contagias de ese espíritu y esos valores. En el vestuario lo tenemos muy claro: no nos vamos a rendir. Si tenemos que morir, lo haremos matando. afirmó.
El pivote extremeño destacó la actitud del equipo, pero también quiso hacer autocrítica. «Otra vez nos vamos con buenas sensaciones, del Osasuna que sí que queremos ver. Pero en Primera División, si tienes diez minutos malos, te la meten. La diferencia con el resto de categorías es la calidad que hay arriba y esos diez minutos en los que no sé si llamarlo falta de concentración o contundencia… te matan. Todos los partidos no puedes meter tres goles. La premisa de Vasi era que debíamos dejar la portería a cero. Sí que es verdad que así llevaríamos muchos más puntos de los que llevamos, porque llegamos con peligro, con mucha gente, hacemos ocasiones. Es nuestra asignatura pendiente. Si llegamos a tener eso, el equipo dará el salto que necesita», reflexionó.