El próximo 1 de enero de 2015, las rentas medias y bajas volverán a tributar como en 2011.
Este ha sido el acuerdo al que llegaron ayer UPN, PSN y PPN, que blindaron la propuesta fiscal hecha por los socialistas para el próximo ejercicio.
El Parlamento de Navarra aprobó el dictamen sobre la reforma fiscal que debate la cámara en lo relativo a los impuestos de IRPF, Patrimonio y Sociedades, lo que supone que el gravamen de las rentas medias y bajas bajarán en 2015 a los niveles de 2011 y se aligerará la carga sobre las altas.
El Impuesto de Patrimonio se incrementa el mínimo exento a 800.000 euros, se rebaja la tarifa un veinte por ciento, se eleva el umbral de tributación y «se suaviza el escudo fiscal», mientras que para el de Sociedades se minoran los tipos sin comprometer la recaudación y se potencia la investigación y la innovación.
Esta modificación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), esta recogida en el artículo 1 de la proposición de Ley y avalada por UPN y PSN, plantea una reducción de tipos a todas las rentas, especialmente bajas y medias, que vuelven a niveles de 2011. Además, se deflacta la escala un tres por ciento, con el fin de impedir que la inflación incremente la carga fiscal.