El exconsejero madrileño Alberto López Viejo ha negado hoy en el juicio de Gürtel que existiera una trama corrupta en la Comunidad de Madrid y ha defendido que las empresas de Francisco Correa no tenían el «monopolio» de la contratación de eventos en el gobierno regional.
López Viejo, que fue viceconsejero de Presidencia y consejero de Deportes con Esperanza Aguirre como presidenta, ha acabado hoy de declarar ante el tribunal y ha seguido defendiendo, como ya hizo ayer, que él no tomó ninguna decisión relacionada con la contratación de las empresas de Correa.