El 85% de las hectáreas quemadas ardieron en el mes de abril, que concentró también casi la mitad del número de incendios total
La campaña de prevención y extinción de incendios forestales realizada por el Gobierno de Navarra entre los pasados meses de enero y abril ha finalizado con un descenso del 30% en el número de fuegos declarados respecto al año anterior, pasando de los 464 de 2014 a los 324 de este año.
No obstante, el número de hectáreas afectadas ha aumentado un 10% respecto al pasado año, de las 329,58 de 2014 a las 361,14 de este año. Cabe destacar que el 85% de la superficie quemada ardió en el mes de abril, que concentró también el 45% del número total de incendios. De hecho, este mes ha sido el peor abril de al menos los siete últimos años.
Del total de superficie quemada, el 98% ha sido terreno forestal y el 2% agrícola. Por número de hectáreas, 193,73 han sido de matorral; 139,50 de pastos; 16,02 de arbolado; 5,21 de arbolado con restos silvícolas; 4,65 de rastrojos; y 2,03 de otros.
Los parques de bomberos con más intervenciones en incendios de vegetación durante este invierno han sido el de Tudela, con 77 actuaciones; el de Oronoz, con 42; el de Tafalla, con 40; el de Cordovilla, con 39; y el de Peralta, con 21. El resto de parques (Alsasua, Burguete, Lodosa, Navascués, Sangüesa y Trinitarios) no han llegado a la veintena de intervenciones cada uno.
Quemas controladas de pastos
En el marco de esta campaña de prevención y extinción de incendios de invierno también se realizan quemas controladas de pastos en la zona norte con el fin de evitar incendios forestales. En esta iniciativa participan, de un modo coordinado, la Agencia Navarra de Emergencias, el Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local, las entidades locales y los ganaderos.
Así, los bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias y el personal del Servicio de Montes han participado en 18 quemas controladas de pastos realizadas sobre una superficie de 177,12 hectáreas de la zona de Baztan, Cinco Villas, Malerreka y Valcarlos. Junto con ellos han trabajado, de modo coordinado, dos equipos de prevención de incendios forestales (EPRIF) cedidos por el Ministerio de Medio Ambiente, las entidades locales de la zona y los ganadores de las comarcas de Baztan-Bidasoa y pirenaica.
No obstante, otras 17 quemas que habían sido autorizadas, con un total de 260,95 hectáreas, no han podido realizarse debido a las condiciones meteorológicas, que solo han sido adecuadas en el mes de abril. De hecho, aunque el refuerzo del parque comarcal de bomberos de Oronoz estaba previsto hasta el 4 de abril, finalmente se ha prorrogado hasta el 26 de abril.
Con estas intervenciones se pretenden evitar las quemas descontroladas de pastizales que, posteriormente, se traducen en incendios forestales. Las quemas son autorizadas por el Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local y se planifican en función del nivel de riesgo. En aquellas que pueden conllevar más peligro (por viento, elevadas temperaturas, etc.) o son de mayor extensión participa un equipo multidisciplinar integrado por los EPRIF, los bomberos profesionales, auxiliares contratados y voluntarios de la ANE, y personal de la Sección de Gestión Forestal y de la Sección de Guarderío Forestal.
Por último, cabe destacar que dentro de estas labores de prevención de incendios forestales también se realizan quemas preventivas en zonas de alto riesgo de inicio o propagación de incendios (por tener antecedentes de incendios, su tipo de vegetación, el uso del suelo, su proximidad a poblaciones, industrias o caseríos, etc), así como labores de vigilancia, de conocimiento del terreno y de adecuación de pistas forestales y puntos de abastecimiento de agua para vehículos y medios aéreos.
