El actual presidente firmó con Estados Unidos y con la OTAN al día después de tomar posesión los acuerdos de seguridad que Karzai rechazó renovar
El presidente afgano, Ashraf Gani, viaja hoy por primera vez a Washington en busca de una presencia más prologada de las tropas de Estados Unidos en el país asiático y del mantenimiento de la ayuda económica estadounidense.
Gani viaja acompañado del jefe de Gobierno de Afganistán, Abdulá Abdulá, cuyo portavoz, Javid Faisal, aseguró a Efe que el presidente «quiere que las tropas estadounidenses permanezcan más allá de 2016 o al menos extender algo su misión para ayudar a las Fuerzas de Seguridad afganas».
Estados Unidos prevé reducir este número a la mitad al finalizar 2015, con lo que mantendría unos 5.500 militares, para recortarlo al término de 2016 a solo unos 1.000 necesarios para la seguridad de la embajada en Kabul.
«Todavía necesitamos el apoyo técnico y financiero de nuestros aliados extranjeros para nuestras Fuerzas de Seguridad, en diferentes aspectos», afirmó el portavoz.
El Ejército y la Policía afganos cuentan con unos 350.000 efectivos y el año pasado asumieron el mando de la lucha contra los insurgentes, una vez que la misión de combate de la OTAN, la ISAF, terminaba en 2014 para dar paso en 2015 a la operación Apoyo Decidido de asistencia y capacitación de las fuerzas locales.
El actual presidente firmó con Estados Unidos y con la OTAN al día después de tomar posesión los acuerdos de seguridad que Karzai rechazó renovar.