Un general intenta impedir que el arzobispo de Lubumbashi celebre la misa de Cristo Rey: “Un acto ilegal contra la Constitución”
“Una orden ilegal que el arzobispo de Lubumbashi no ha obedecido”. Así describe en una nota la archidiócesis de Lubumbashi (en el sur de la República Democrática del Congo) la prohibición ordenada por Eddy Kapend Yrung, comandante de la 22ª región militar, al arzobispo Fulgence Muteba Mugalu, al arzobispo de Lubumbashi y presidente de la Conferencia Episcopal Nacional del Congo (CENCO), de celebrar la misa de la solemnidad de Cristo Rey en la parroquia de San Sebastián, situada en el interior del campamento militar de Vangu.
“Sin dejarse intimidar por esta orden ilegal, síntoma de un manifiesto abuso de autoridad, el arzobispo acudió a San Sebastián, como tenía previsto hacer desde hacía varios días”, dice el comunicado. El arzobispo Muteba fue recibido por una “multitud entusiasta de varios fieles a la entrada de la Iglesia”, prosigue la nota.
La Archidiócesis de Lubumbashi considera que la actuación del general “es contraria al respeto de la libertad religiosa, garantizada por la Constitución, así como por el Acuerdo Marco entre la Santa Sede y la República Democrática del Congo”.
Se trata del segundo episodio de tensión entre la archidiócesis de Lubumbashi y los militares congoleños, tras el secuestro de un seminarista en el Seminario Mayor Interdiocesano San Pablo de Lubumbashi, el pasado 18 de noviembre. El joven fue secuestrado por un puñado de soldados a las órdenes de un coronel en el patio de las instalaciones.
El seminarista fue liberado más tarde, en la noche del mismo día.
Según la Archidiócesis, estos episodios están relacionados con un conflicto de tierras en torno a la concesión del Seminario Mayor, que es objeto de expropiaciones recurrentes. “Estos hechos no son fortuitos ni obra de vulgares bandidos, sino que están vinculados a las maniobras de quienes se apropian ilegalmente de terrenos de la Iglesia”, afirma el arzobispo Muteba, que recuerda que varias sentencias han reconocido los derechos de la Iglesia sobre estas propiedades desde 1976. AGENZIA FIDES