Últimas noticias

La máxima extensión del imperio español

La máxima extensión del imperio español

Número 38

Máxima extensión del Imperio Español

Tras la guerra de Independencia española (1808-1814) contra el invasor francés, las posesiones españolas en América van desapareciendo.

Los criollos – descendientes de españoles nacidos en América- y poseedores de grandes fortunas, ven como pueden dirigir la economía y la política americana sin la intercesión de su rey Fernando.

Fruto de este pensamiento, de la propia guerra de la independencia, que impide a España llevar contingentes de tropas a sus territorios americanos y de otras razones que nos harían extender este artículo más allá de lo debido puede decirse que para 1825, España, salvo Cuba y Puerto Rico pierde sus posesiones en el continente americano.

Pero paradoja del destino sólo unos años antes, el imperio español había alcanzado su máxima extensión territorial y precisamente por el tema que nos ocupa hoy y que sucedió un 21 de febrero de 1821.

Hablamos del tratado de Adáms- Onís o lo que es lo mismo la firma entre Jhon Quincy Adáms , secretario de estado  de los EEUU, luego presidente, y de Luis de Onís representante de su majestad Fernando VII de España.

En dicho tratado se establecía de forma oficial, cosa que España no había acometido nunca, la frontera entre España, con su provincia el Virreinato de Nueva España y los Estados Unidos de América.

Debe recordarse que más de las dos terceras partes de lo que hoy es EEUU estaban bajo el poder español. Pero ambas naciones no querían la guerra. Una por estar en franco crecimiento y otra por que estaba en declive y era dueña de más territorio del que podía de una forma efectiva controlar.

La frontera se fijó en el paralelo 42. España cedía sus territorios situados al norte de dicho paralelo (Florida, por ejemplo) pero adquiría Texas.

Lamentablemente, España, poco tiempo después vería que su Virreinato, el de Nueva España se desintegraba a manos de México. Y a este, unos pocos años más tarde, EEUU le privaría de Texas. Pero eso es ya otra historia..

Andrés Valencia, profesor e historiador

Artículo anterior El miedo del Rey

About The Author

Otras noticias publicadas

Responder

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies