La prórroga de las medidas restrictivas azotan de nuevo de manera especial a la hostelería, único sector sobre el que se decreta un cierre total de interiores, lo que afecta a la mayoría de empresas y personas trabajadoras.
Nos alargan el cierre, quince días más a los que no sabemos si se añadirán nuevas semanas de cierres totales o parciales, un cierre que de nuevo no consideramos justificado y contra el que queremos expresar de nuevo nuestra más enérgica protesta. No compartimos manifestaciones que nos llegan desde el Gobierno de Navarra que dicen que la hostelería lo que no quiere es dar un paso para adelante para que en quince días se den dos para atrás… Lo que la hostelería quiere es trabajar, sacar adelante sus negocios, mantener los puestos de trabajo y no estar siempre pendientes de decretos que no están suficientemente explicados, con razones científicas que digan claramente por qué somos foco de contagios.
Lo que reclamamos es bien sencillo: abrir nuestros negocios y sacar a las personas que trabajan en ellos de los ERTES o recibir todas las empresas y trabajadoras compensaciones suficientes que permitan en un futuro continuar con nuestros negocios y con todas las personas que en ellos trabajan.
La hostelería sumaba en Navarra a principios de 2020 a 18.500 personas, de las cuales 14.307 eran trabajadoras del sector y el resto personas autónomas. Al cierre de 2020 ya habían perdido su puesto de trabajo 3.304 personas; y las cosas van a peor cada día que pasa.
Asociación Navarra de Pequeña Empresa de Hostelaría (ANAPEH)