La Policía Foral atendió durante 2019 en sus Oficinas de Atención Policial un total de 82 denuncias por desaparición de personas mayores de edad. En todas ellas la Brigada de Delitos contra las Personas, de la División de Policía Judicial, abrió diligencias para la localización de las personas desaparecidas, sin que en la actualidad exista ningún caso activo de alto riesgo
Por sexos, en 52 casos se denunció la desaparición de hombres y en 30 de mujeres. Por zonas de Navarra, el mayor número de denuncias se registró en Pamplona y comarca, con un total de 68 casos.
Por tramos de edad, el comprendido entre los 18 y los 30 años es el que más denuncias por desaparición ha provocado, al igual que en 2018, año en el que se atendieron 66 denuncias. Con las 82 de 2019 se ha producido un incremento del 24 % en la recogida e investigación de este tipo de denuncia.
Policía Foral recomienda llamar cuanto antes al 112 ante la sospecha de la desaparición de una persona
Ante las primeras sospechas de que una persona ha podido desaparecer, la Policía Foral aconseja llamar cuanto antes a los servicios de emergencia. Las horas iniciales pueden ser determinantes para el buen desenlace del asunto debido a que se pueden obtener testimonios recientes, se pueden asegurar pruebas y puede que el desaparecido esté cerca del último lugar en que fue visto. En ningún caso debe esperarse 24 horas como cree mucha gente.
Una vez que se sospeche de la desaparición de una persona, lo más conveniente es ponerse en contacto cuanto antes con el 112. En ese momento, se debe facilitar todo tipo de información que pueda ser de interés para la búsqueda de esa persona y que será requerida por el operador que atienda telefónicamente.
Con posterioridad, es importante presentar denuncia por la desaparición en una comisaría de policía, aportando formalmente toda la información que le sea solicitada en función de las circunstancias del caso. Asimismo, deberá aportarse una fotografía reciente, características físicas y rasgos diferenciales, ropa que llevaba en el momento de desaparecer, así como otros datos que puedan ser necesarios para los investigadores (como número de teléfono del desaparecido, amigos de contacto, entidades bancarias donde tiene cuentas, lugares significativos para el desaparecido…).
Una vez interpuesta la denuncia de desaparición, se inserta un señalamiento de búsqueda de persona desaparecida en la Base de Datos de Señalamientos Nacionales y Schengen (SIS). De esta forma, cualquier funcionario de policía que identifique a la persona desaparecida puede conocer que existe una denuncia por desaparición de la misma.