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La candidata de Geroa Bai a revalidar la presidencia del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, ha apostado por la economía circular, la cultura plural, las energías renovables y la lucha contra el desequilibrio territorial
En un acto electoral celebrado en Sarriguren, acompañada de Pablo Azcona, candidato de la coalición al Parlamento foral, Barkos ha destacado el «protagonismo esencial» del ámbito municipal en el cambio político que ahora, ha dicho, «toca afianzar» para avanzar.
«Debemos hacer el tránsito de la economía lineal a la economía circular, de la cultura uniforme a la cultura plural, de la energía supuestamente infinita en recursos a las energías renovables, y de la concentración territorial al equilibrio territorial», ha afirmado.
Y ha añadido que el equilibrio territorial supone que todas las zonas «tengan estándares básicos de calidad de vida, de servicios e infraestructuras, que todas disfruten del desarrollo de Navarra, sin que ninguna quede atrás; en definitiva, y este es el objetivo de la campaña de Geroa Bai, que todas las zonas de Navarra tengan perspectiva de futuro».
Esto, ha añadido Barkos, «supone equidad, que no uniformidad; supone distribuir de forma justa la riqueza y los recursos; y supone evitar la macrocefalia, que viene de la cultura unitaria frente a la cultura plural».
Y ha recordado las consecuencias negativas de la falta de equilibrio territorial, como el despoblamiento y la afección al medio ambiente, y repasado medidas adoptadas por su Gobierno para fomentar el equilibrio territorial, como la financiación de inversiones locales o la banda ancha,
Por su parte, Pablo Azcona se ha referido a algunas medidas de Geroa Bai para la siguiente legislatura, como un Plan de Actuación orientado al equilibrio territorial, que incluya propuestas de distribución de servicios en las comarcas, propuestas de infraestructuras básicas y la colaboración con el sector privado para el asentamiento de servicios que no dependen directamente de la administración.
Azcona ha destacado también la importancia de «la política pública de vivienda» para luchar contra el despoblamiento y fomentar el equilibrio territorial y ha apostado por «reforzar la cooperación y colaboración interadministrativa».
«La gran apuesta -ha subrayado- es el cambio de modelo institucional» para que la equidad y eficiencia sean «la base del equilibrio territorial».
