El exconsejero madrileño y exdirigente regional del PP Francisco Granados se enfrenta este martes a una petición de la Fiscalía de tres años de cárcel por el chivatazo de la operación policial que le llevó a prisión, en el que será el primer juicio del caso Púnica que celebra la Audiencia Nacional.
Los mismos años pide para el guardia civil José Manuel Rodríguez Talamino, responsable de dar el soplo, y para su amigo José Manuel Caro, guardia civil en excedencia y exasesor de la Comunidad de Madrid. A todos ellos les acusa de un delito de violación de secretos.