Óscar Arizcueren, secretario general de UPN.
NAVARRAINFORMACION.ES
El vicepresidente de UPN, Oscar Arizcuren, ha acusado a Geroa Bai de “fariseísmo e hipocresía política” por las acusaciones que ha vertido contra UPN y contra su presidente, Javier Esparza, a raíz de la sentencia del Tribunal de Cuentas por el caso de las dietas de Uxue Barkos
“Es inaudito que, con la trayectoria de ejercicio de política basura que tiene a sus espaldas Geroa Bai, hable de maniobra de acoso y derribo contra la presidenta del Gobierno. No sé cómo habría que llamar entonces a lo que hicieron con Lourdes Goicoechea y el deleznable pacto del almacén, ni a la persecución a la que durante toda la legislatura anterior sometieron a Yolanda Barcina y a otros miembros de UPN”, ha afirmado.
“Ahora quieren hacer lo propio con Javier Esparza, tal vez porque saben que va a ser el próximo presidente de Navarra”, ha dicho Arizcuren, quien ha recordado cómo se ha querido involucrar de manera torticera al presidente de UPN en el caso de las subvenciones de la UAGN o en el caso de la planta de purines de Ultzama, que la fiscalía ha archivado recientemente. “Solo el miedo a perder el Gobierno, el ansia de sentirse por encima del bien y del mal y su empecinamiento en no aceptar las críticas explican la inquina de Geroa Bai contra Javier Esparza”.
El vicepresidente de UPN ha recordado cómo UPN ha sido “extremadamente escrupuloso” con el asunto de las dietas de Barkos, y se ha preguntado “cuántas comisiones de investigación y cuántas peticiones de dimisión se hubieran producido a lo largo de todos estos meses sin en lugar de Barkos los encausados hubieran sido Sanz, Barcina o Esparza”. “Quienes tenían mucho miedo de lo que pudiera decir la sentencia eran Uxue Barkos y su entorno, que incluso ya tenían preparado cómo iban a actuar en caso de resultar condenada”, ha aseverado.
“El señor Martínez es un mentiroso compulsivo que vuelve a mentir cuando acusa a UPN de estar detrás del proceso contra Barkos”, ha sentenciado. “En su afán por querer controlarlo todo, en su estilo bronco, belicista y faltón habitual de hacer política, más propio de los actuales sátrapas populistas, preferiría una oposición callada y amordazada ante un proceso tan grave. Tal vez hayan conseguido el silencio de sus socios en este y en otros asuntos pero, desde luego, a UPN no le van a callar ni le van a decir cómo tiene que hacer su trabajo”, ha dicho Arizcuren. “Pese a que la sentencia del Tribunal de Cuentas considera no probadas las acusaciones contra Barkos, todos los navarros saben que no se puede estar en dos sitios al mismo tiempo. Uxue Barkos no puede dar lecciones ni de ética, ni de estética ni de respeto a la legalidad, como está evidenciando el gobierno que dirige”.
Por último, Arizcuren ha considerado que “vergüenza es alcanzar el Gobierno mintiendo. Vergüeza es intentar engañar a los navarros. Vergüeza es gobernar solo para unos pocos e imponer en Navarra una dictadura nacionalista”.
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