Anoeta, un campo insuperable para el Barcelona en sus últimas siete visitas de Liga, y la Real Sociedad multiplicaron las dudas del Barcelona, que titubeó, sufrió y salvó un punto entre la polémica; todo lo contrario que el Atlético de Madrid, reconfortado y con dos minutos incontestables en Pamplona.
A las puertas del ‘Clásico’ del sábado en el Camp Nou, ganador el Real Madrid el sábado con Cristiano Ronaldo de nuevo como goleador y con más apuros que certezas, y vencedor el Sevilla con aprietos ante el Valencia, no hubo respuesta del Barcelona ni del Villarreal, los dos equipos que salen debilitados de este domingo en la jornada 13.
De ese duelo estará pendiente el Atlético, que goleó a Osasuna y a las dudas, generadas por las dos derrotas seguidas en la Liga. Su 0-3 en Pamplona, la confirmación de su reacción después del 2-0 del miércoles al PSV en la Champions, lo construyó con un penalti parado por el esloveno Jan Oblak y dos minutos decisivos e imparables.
Cada vez que le marcan desde los once metros surge el recuerdo de la tanda de la última final de la Liga de Campeones ante el Real Madrid, pero Oblak acumula suficientes ejemplos de su acierto en esos lanzamientos recientemente. A final del curso pasado paró uno a Thomas Müller en las semifinales de Champions contra el Bayern, en el actual despejó uno al PSV y este domingo lo repitió ante Osasuna. De ocho penaltis con el Atlético, sin tandas, ha parado cuatro.