La fiscalía alemana aseguró hoy que el accidente de tren que la semana pasada causó la muerte de once personas fue un «error humano» y avanzó que investiga a un controlador del tráfico ferroviario por homicidio involuntario.
El fiscal jefe Wolfgang Giese aseguró en rueda de prensa que el siniestro, en el que dos cercanías chocaron de frente ocasionando el peor accidente ferroviario de los últimos cinco años en Alemania, se debió al equívoco de un empleado, tras descartar un fallo técnico.
Giese ha descartado por tanto el fallo técnico, si bien también ha querido dejar claro que no se trató de una acción deliberada por parte de nadie, según informa el periódico alemán ‘Deutsche Welle’. De hecho, el controlador llegó a darse cuenta de su error e hizo sonar la alarma, aunque ya era demasiado tarde y no pudo evitar el impacto frontal de los dos convoyes, que circulaban por la misma vía.
Un portavoz de la Policía, Robert Kopp, ha añadido que los exámenes toxicológicos realizados a los dos conductores –fallecidos en el siniestro– y al controlador ferroviario han descartado el consumo de alcohol. El supuesto responsable del siniestro no se encuentra detenido y se ha ofrecido a colaborar con las investigaciones.