El nuevo arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, ha dicho hoy que va a empezar a conocer Cataluña para poderla amar con todo su ser y que este camino quiere hacerlo «libre de prejuicios, con un corazón abierto y unos oídos atentos».
Omella, que sustituye a Lluís Martínez Sistach, ha tomado posesión como arzobispo metropolitano de Barcelona, en un acto litúrgico al que han asistido 59 arzobispos y obispos de toda España.
El hasta ahora obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño ha señalado también que desea evangelizar sin anclarse en «viejos métodos o en ideologías mundanas» y se ha comprometido con los más pobres y necesitados, según ha dicho en su primera homilía celebrada hoy en la Catedral barcelonesa.