El Parlament ha aprobado hoy pedir un referéndum consultivo sobre monarquía o república, si bien sólo ha contado con el apoyo de ERC, ICV-EUiA y la CUP, mientras que CiU, PSC y Ciutadans se han abstenido y el PPC ha votado en contra. Las 74 abstenciones del partido del Govern, socialistas y C’s han permitido que la reclamación del referendo prosperara pese a contar sólo con 33 votos a favor, frente a los 18 en contra de los populares.
La cámara catalana ha debatido y votado una moción del grupo de ICV-EUiA sobre la abdicación y la sucesión en la monarquía española, en la que se reclama, asimismo, la celebración de un referéndum consultivo sobre el modelo de Estado y se defiende el ejercicio del derecho a decidir.
Además, la cámara catalana lamenta el «carácter de urgencia» con el que se ha aprobado la Ley Orgánica que regula la abdicación del Rey, punto en el que los grupos parlamentarios han votado igual que en la cuestión del referéndum sobre el modelo de Estado.
El Parlament considera, asimismo, que el pacto constitucional sobre el que se fundamenta la sucesión en la corona «se ha roto desde el punto de vista territorial, social y democrático», lo que «niega legitimidad» al relevo en la jefatura del Estado sin un aval democrático, punto que se ha aprobado con los votos de ERC, ICV-EUiA y la CUP, mientras que CiU y PSC se han abstenido y el PPC y Ciutadans han votado en contra.
En la moción, se constata asimismo que el «futuro democrático social y legal de convivencia» se tiene que fundar en el ejercicio del derecho a decidir, punto que CiU ha apoyado votando a favor junto a ERC, ICV-EUiA y la CUP y en el que los socialistas se han abstenido de nuevo, y el PPC y C’s se han posicionado en contra.
En la presentación de la moción, el presidente del grupo de ICV-EUiA, Joan Herrera, ha considerado que la coronación de Felipe VI como Rey busca «perpetuar» un pacto «sin la legitimidad democrática» necesaria y una institución, la monarquía, sobre la que existe una «sensación de impunidad». Herrera ha defendido la celebración de un referéndum consultivo porque, ha argumentado, el pacto constitucional «está roto» y no hay «legitimidad sin el aval ciudadano».
El diputado de CiU David Bonvehí ha justificado la abstención de su grupo en los puntos referentes a la sucesión y al modelo de Estado, entre otras cosas, porque se trata de un debate que no es el «central» para la sociedad catalana: «Este debate no debe distraernos de nuestros objetivos» y «desdibujar» el proceso soberanista, ha argumentado.
Por su parte, el portavoz del PSC en el Parlament, Maurici Lucena, ha defendido la abstención de su grupo porque entienden que el referéndum sobre el modelo de Estado hay que situarlo en el marco de una reforma de la Constitución en lugar de celebrar consultas ciudadanas «por fascículos».
En el lado opuesto, el diputado del PPC Fernando Sánchez ha tachado de «debate antiguo» la cuestión del modelo de Estado, y ha recriminado a los ecosocialistas que su propuesta de referéndum no se base sólo en la «forma política» del Estado sino que tiene un «contenido ideológico».
Tanto ERC como la CUP han vinculado este tema con el debate soberanista al defender una república catalana, mientras que C’s ha instado a los ecosocialistas a llevar este debate al Congreso y a conseguir los dos tercios necesarios para poder hacer este referéndum.
