Seis presuntos yihadistas han sido detenidos esta madrugada en Melilla en una operación conjunta de la Comisaría General de Información de la Policía y el Servicio de Información de la Guardia Civil contra una red que se dedicaba a enviar a jóvenes a campamentos de Al Qaeda en Siria, Malí y Libia, según fuentes policiales. Todos los detenidos son españoles y entre ellos figura el primer caso de un retornado desde Malí que se unió a la rama del grupo terrorista en el Magreb, AQMI, asentado en el Sahel y que secuestró y mantuvo cautivo a varios cooperantes españoles.
En esta operación se han realizado siete registros y la detención de Mustafá Al Lal Mohamed, Benaissa Laghmouchi Baghdadi, Kamal Mohamed Dris, Rachid Abdel Nahet Hamed, Mohamed Mohamed Benali y Mustafá Zizaoui Mohan. La seguridad aérea de la operación ha sido dada por dos helicópteros, uno de Policía Nacional y otro de Guardia Civil.
El retornado de Mali es Benaissa Laghmouchi Baghdadi, que había pasado en torno a ocho meses en Siria. De vuelta en España, se había convertido en un jefe de una célula yihadista. Laghmouchi está supuestamente relacionado con el Movimiento para la Unicidad y la Yihad en África Occidental (Mujao), una organización formada a partir de una ramificación de Al-Qaeda en el Magreb en 2011.
Fuentes policiales sospechan que alrededor de mil marroquíes que han estado combatiendo en Siria van a regresar en las próximas semanas o meses a su país de origen. Hace unos días, uno de estos individuos se presentó en un consulado español en Turquía manifestando su deseo de regresar a Melilla, tras haber pasado unos meses en Siria.
Un numeroso grupo de vecinos de La Cañada ha increpado a la Policía Nacional y a la Guardia Civil, junto a la Mezquita del barrio, cuando los agentes policiales salían del registro de una de las viviendas. Los policías tuvieron que abrir paso a los furgones policiales. Entonces los vecinos empezaron a lanzar piedras, algunas de estas impactaron contra las lunas de los vehículos rompiéndolas. Los seis detenidos han sido trasladados al aeropuerto de Melilla para ser conducidos ante la Audiencia Nacional.
La operación antiterrorista ordenada por un juez de la Audiencia Nacional se ha desarrollado a las cuatro de la madrugada y es continuación de la redada contra la red de Mustafá Maya, de 51 años, desarticulada el pasado mes de marzo en Melilla y en la que fueron detenidas otras siete personas. Maya envió a decenas de jóvenes a Siria procedentes de nueve países distintos para combatir junto a grupos afines a Al Qaeda contra las tropas de Bachar el Asad.
