El hecho ocurrido en agosto de este año, me lleva a compartir la siguiente reflexión: ¿sobre quién va a caer la responsabilidad del “siniestro”? ¿quién va a pagar los daños ocasionados? ¿la avioneta o el buitre?
Al no haber señalización por “ahí arriba” es un problema hacer de Juez. Sí, es verdad que los buitres vuelan por encima de nosotros mucho antes que los aviones, pero no es menos verdad que los buitres, en número, han aumentado mucho. Algunos ganaderos consideran que el aumento ha sido en exceso, ya que ven como sus ganados son atacados aun estando vivos. Los buitres no esperan a su instinto de atacar al animal muerto.
Yo no soy quien para juzgar a nadie, pero si está demostrado que este aumento de buitres está motivado y es a causa de los “comedores artificiales y oficiales” para estos animales. Soy partidario de que hay que dejar que la naturaleza siga su curso. Por lo que considero que estos comedores no son necesarios en absoluto.
Así está el mundo. ¡Qué suerte tienen los buitres que cuentan con tantos cuidadores, mientras tantísima gente en el mundo se está muriendo de hambre.
Pello Urquiola, de Leiza (Navarra)