NAVARRAINFORMACION,ES
El Grupo Municipal de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona ha reclamado hoy que “se retiren de forma inmediata todas las pancartas relativas a presos de ETA y con consignas radicales colocadas en el barrio de Mendillorri con motivo de sus fiestas”
Los concejales regionalistas han explicado que un colegio público ha amanecido esta mañana plagado de carteles y han hecho hincapié en que el edificio “es de propiedad municipal” y que “resulta del todo vergonzoso e insultante que se utilice precisamente una infraestructura educativa para hacer propaganda del odio más radical que propagan los grupos del entorno de Bildu”.
Sin embargo, según han apuntado, “el Ayuntamiento de Asirón vuelve a mirar hacia otro lado para permitir que un edificio municipal y las fiestas de un barrio se utilicen para este tipo de acciones”.
“Una vez más se politizan las fiestas de un barrio para hacer propaganda de la ideología más radical, amparar la violencia etarra y lanzar un mensaje de odio y sectarismo”, han denunciado, añadiendo que “Asirón no sólo está permitiendo que las fiestas incluyan estas actividades, sino que además las está subvencionando desde las áreas de Cultura y Participación”.
“Es la enésima prueba del favoritismo hacia sus grupos afines de un cuatripartito que se salta la ‘Ordenanza general de subvenciones’, que recoge que ‘no pueden ser objeto de subvención aquellas actividades que incluyan, bien originaria o sobrevenidamente, actos de carácter político o reivindicativo, ni las que por cualquier medio sean utilizadas, aún a título de mera tolerancia, para llevar a cabo dicho tipo de actos’”, han afirmado.
De hecho, tal y como han explicado los concejales de UPN, “pese a los numerosos ejemplos similares a lo largo de esta legislatura, Bildu y sus socios se han negado repetidamente a aplicar esa cláusula”.
Según UPN, “con su actitud, permitiendo este tipo de acciones en muchas de las fiestas de los barrios, Asirón y el resto de fuerzas del cuatripartito están generando espacios de exclusión y odio en donde la mayoría de los ciudadanos de Pamplona no son bienvenidos”.
“Basta ya utilizar eventos que deberían ser abiertos y populares para normalizar la sangrienta historia de ETA y la radicalidad de sus postulados”, han concluido.