El Presidente de la Conferencia Episcopal afirma que «la explosión de delitos en Nigeria está relacionada con la difusión de las drogas entre los jóvenes»
«Nuestros jóvenes son consumidores excesivos de drogas duras y hacen todo tipo de cosas inimaginables. Se arman, roban y secuestran a conciudadanos. ¿Cómo explicar que hoy se mate sin sentido a la gente, como si la vida humana no fuera preciosa e inalienable?», ha declarado Lucius Iwejuru Ugorji, arzobispo metropolitano de Owerri y presidente de la Conferencia Episcopal Católica de Nigeria (CBCN). Según el arzobispo, la «explosión de la criminalidad en Nigeria está ligada a la difusión de la droga entre los jóvenes», señalando el consumo de drogas duras como un factor clave en los actos delictivos que ponen en grave peligro la convivencia pacífica en el país.
El prelado ha evocado el conflicto de Biafra al expresar su preocupación: «Parece que estamos sufriendo más que durante la guerra de 30 meses entre Nigeria y Biafra, causada por la pura codicia de nuestros dirigentes», en referencia a la guerra civil que tuvo lugar entre 1967 y 1970. Además, Ugorji ha cuestionado el origen de la violencia, afirmando que «si estas cosas horribles no hubieran sido causadas por el consumo de drogas duras, ¿a qué habríamos atribuido estas acciones?». También ha enfatizado que «los autores de estos crímenes proceden de nuestras comunidades. No vienen de ninguna parte. No son realmente pistoleros desconocidos, como se les suele calificar».
Según el informe de la ONUDC de 2018 ‘Drug use in Nigeria’ (Consumo de drogas en Nigeria), que fue la primera encuesta nacional a gran escala sobre el consumo de drogas en Nigeria, una de cada siete personas (de entre 15 y 64 años) ha consumido drogas en el último año. Además, una de cada cinco personas que han consumido drogas en el último año sufre trastornos relacionados con las drogas.
Asimismo, según la ONUDC, el consumo de drogas está detrás de muchos delitos como el hurto, el robo con allanamiento de morada, la prostitución y el atraco a comercios. También hay crímenes directamente relacionados con el tráfico de drogas. Las bandas y redes delictivas implicadas en el tráfico de drogas recurren al soborno, la intimidación y el asesinato para proteger su negocio. La violencia asociada al narcotráfico aumenta aún más la tasa de criminalidad, contribuyendo a perpetuar la anarquía y la inseguridad.
La difusión de las drogas entre los jóvenes también se ve alentada por los vídeos de raperos locales que ensalzan su consumo.
A pesar de las medidas adoptadas por las autoridades nigerianas para combatir el fenómeno, en 2021 el número de nigerianos consumidores habituales de drogas era de al menos de 14 millones según la Agencia Nacional Nigeriana de Control de Drogas (Nigerian National Drug Law Enforcement Agency).
Entre las sustancias más populares, sobre todo entre los jóvenes, están el cannabis, la cocaína, la heroína, el diazepam, el tramadol, las anfetaminas y la codeína.
En Nigeria se está estudiando un proyecto de ley para condenar a los narcotraficantes a la pena de muerte, lo que está provocando fuertes reacciones de abogados y defensores de los derechos humanos, que lo consideran innecesario e inhumano (la ley actual prevé hasta cadena perpetua para los casos más graves de narcotráfico). AGENZIA FIDES