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El presidente Sánchez, después de tres días de violencia en las calles de distintos puntos de España y tras las declaraciones de Iglesias o Echenique, ha afirmado que «la democracia nunca jamás ampara la violencia»
El presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, ha roto su silencio después de las manifestaciones contradictorias de miembros de su gobierno y de que Podemos no condene la violencia en la calle. Tras tres días de violencia callejera y situación política creada por la decisión de encarcelar al rapero Hasel.
«La democracia nunca jamás ampara la violencia, es lo contrario a la democracia», ha dicho en el acto para presentar en Mérida el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española.
Sánchez ha dejado claro que «la democracia española ampara la libertad de manifestación y de expresión. Pero la democracia jamás amparará la violencia. Es lo contrario a la democracia».
No obstante, ha añadido que «el Gobierno quiere ampliar y mejorar la protección de la libertad de expresión, siempre desde el diálogo y la concordia». Porque la democracia debe amparar hasta las más «infames» opiniones, pero «nunca jamás ampara la violencia». «En una democracia plena como la española, es inadmisible el uso de la violencia, ante la que el Gobierno actuará» porque representa un «ataque a la libertad de los demás» y la «negación misma de la propia democracia», ha dicho.
Pues aplica el cuento y cesa a tu socio de gobierno