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España y Reino Unido alcanzaron un principio de acuerdo para mantener el libre tránsito hacia y desde Gibraltar una vez que los británicos abandonen la Unión Europea este viernes pasado el Período de Transición del Brexit.
Para evitar una «frontera dura», ambos países acordaron que Gibraltar se una a Schengen, el espacio europeo de libre circulación que integran 26 países (22 de la UE más Noruega, Suiza, Islandia y Liechtenstein) y del que Reino Unido nunca ha formado parte.
De esta mantera y según ha explicado la ministra de Exteriores Arancha González Laya la frontera «se cambia por controles Schengen en el puerto y el aeropuerto de Gibraltar. Hemos reservado un papel para Frontex en la aplicación de este acuerdo durante el periodo de implementación establecido en cuatro años, durante el cual Frontex asistirá en estos controles».
Acuerdo a todas luces insuficiente para las aspiraciones españolas sobre la colonia británica.