Que el presidente Sánchez asegurara ayer, con el lema «España puede», entre empresarios y banca, que la legislatura “se agotará” y el gobierno de coalición “se mantendrá” y el Ibex bajara más del 2% después de la foto de éste con los principales sectores de la economía española, deja mucho que desear. Más bien, refleja que este actual gobierno de coalición PSOE-Podemos no da confianza ni a la economía, ni al ciudadano, ni a España. Por mucha bandera «mascarillada» a la vista.
Apeló, de nuevo, a la «unidad, unidad y unidad», mientras el portavoz del PP, Martínez Almeida, le recriminaba «no convocar a Casado es incompatible con apelar a la unidad”.
La situación de la pandemia, cumpliendo las normas de seguridad e higiene, esta ahí. Lo peor es la situación creada. Un gobierno que se promete inamovible; un presidente que es puro intento «del todo va bien»; una economía devastada por la gestión; los ciudadanos y familias pasándolo mal, el que no cobra el ERE, está en paro. Y todo se deja al albur del inicio de curso, presencial y obligatorio, y al de los euros -¡a devolver!- de Europa.
Una situación del todo insostenible. Una situación, cuando menos, para «hacérselo mirar».
«España puede» y ¿se puede?