Las delegaciones que el PSOE, Partido Socialista Obrero Español, tiene en Cataluña y en Navarra, PSC y PSN, respectivamente, prefieren alinearse últimamente con quienes humillan constantemente a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Y ninguna respuesta por parte del partido federal.
Si no, no se entiende cómo con sus votos aprueban declaraciones políticas que van en contra de estos citados Cuerpos de Seguridad. Cuerpos de seguridad que son constantemente acosados por los violentos. Tal y como se recoge de lo denunciado públicamente por parte del el Sindicato Unificado de Policía (SUP) en clara referencia al PSC y PSN.
Son los partidos de corte independentista los que no quieren tener cerca a la Guardia Civil y a la Policía Nacional.
Ellos se aprovechan de la debilidad del socialismo español para conseguir sus propósitos. Aunque bien mirado, hay consentimiento por parte del socialismo español, más bien del partido político, del que, últimamente, poco se espera, salvo agarrarse a un clavo ardiendo para mantenerse en el poder y conseguir sus fines. Si para ello hay que claudicar ante las órdenes nacionalistas, pues se claudica. A nada ni a nadie se tiene en cuenta.
Lejos queda la defensa socialista a las víctimas del independentismo o de la violencia y asesinatos de ETA. Hoy las rechaza y se defiende lo indefendible.