
Las elecciones legislativas del 6 de noviembre tendrán incidencia sobre múltiples ámbitos, pero especialmente en la Justicia de EE.UU., ya que los comicios pueden permitir al presidente, Donald Trump, culminar una remodelación conservadora del Tribunal Supremo que persista durante décadas.
Dos jueces confirmados para la corte más importante del país en menos de dos años es el registro de Trump desde que llegó a la Casa Blanca en enero de 2017, algo «muy inusual para un presidente», señaló a Efe la experta en Gobierno de la Universidad George Mason Jennifer Victor.