Un momento de la intervención de la Presidenta Barkos.
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La Presidenta de Navarra, Uxue Barkos, ha destacado que “son datos reales los que avalan que Navarra, con trabajo y resultados, está haciendo frente a la crisis, a la desigualdad social y territorial, y al aislamiento al cual había sido sometida”. En esta línea, ha subrayado que “no solo podemos responder a quienes auguraban un apocalipsis económico, sino que les respondemos superando su inacción cuando no su desidia para hacer frente a la crisis”. “Hoy estamos construyendo una Navarra más fuerte en economía y sociedad”, ha subrayado.
Barkos ha presentado esta mañana el balance con respecto a los tres años de trabajo desde la llegada al Gobierno de Navarra y de este modo ha repasado los principales indicadores socio- económicos, que se recogen en la memoria de acción de Gobierno 2015-18 con la que el Ejecutivo foral quiere rendir cuentas sobre su gestión ante la sociedad.
Así, la Presidenta Barkos ha señalado la estabilidad como primer indicador que define el trabajo del Gobierno de Navarra a lo largo de estos tres años de legislatura. “Estabilidad en la acción de Gobierno y estabilidad en el encuentro político y parlamentario, que ha permitido tener presupuestos en tiempo y forma, y con ellos la acción legislativa necesaria para acometer los cambios impulsados por la labor del Ejecutivo”, ha afirmado Barkos.
Asimismo, ha destacado que estos cambios han estado sustentados en tres principios de acción, que son los que han dirigido la labor del Gobierno de forma transversal en sus políticas, y que son: convivir, construir y avanzar.
Barkos ha explicado que “convivir entre diferentes sensibilidades e identidades, y hacerlo sumando, para trabajar por el futuro de todos y todas las navarras; construir cimientos fuertes para el desarrollo económico, político y social de Navarra, que se concretan en leyes y planes sectoriales que dan cuerpo a los 5 grandes ejes de trabajo de este Gobierno para la sociedad navarra; y avanzar en cambios que doten de fuerza y credibilidad a la Navarra de las próximas décadas”.
De esta forma, la Presidenta ha afirmado que “en definitiva, trabajamos por una economía de futuroque dé sustento real a la Navarra del Bienestar; el bienestar más ambicioso y solidario siempre en la convicción de que las personas y sus derechos son lo primero, que entre ellos la sostenibilidad es un derecho básico, y todo ello porque otra forma de gobernanza es posible”.
Barkos ha recordado que el primer reto en julio de 2015 era la creación de empleo y el saneamiento de las cuentas públicas, y en este sentido ha subrayado que hoy se registran 10.857 personas desempleadas menos, y con respecto a la afiliación a la Seguridad Social, a 30 de junio de 2018 hay 24.268 afiliaciones más que hace tres años. Barkos ha apuntado a acciones públicas determinantes a la hora de impulsar esta creación de empleo y así ha destacado la inversión en infraestructuras que ha pasado de 660.000€ en 2015 a más de 11 millones en 2018, la inversión en planes comarcales o en clusters, el presupuesto en innovación que ha sido prácticamente triplicado, el esfuerzo inversor en empleo social protegido o las inversiones en la extensión de banda ancha a todo el territorio con más de 600 kilómetros de fibra óptica desplegada, entre otros. Estos datos, ha señalado Barkos, explican la tendencia en la creación de empleo y también en la creación de empresas en Navarra que han pasado de las 36.738 existentes en 2015 a las 38.413 de 2017.
De cara a futuro, la Presidenta ha destacado el reto inmediato de más empleo y de mayor calidad, y así ha mencionado la apuesta en innovación en sectores estratégicos detectados en la Estrategia de Especialización Inteligente, y con elementos normativos como la Ley de Ciencia y Tecnología o la apuesta educativa en FP. “Son apuestas para una sociedad fuerte y cohesionada, una sociedad que ante los retos que nos vienen empieza a estar mucho mejor preparada de lo que estuvo ante la crisis que todavía sufrimos”.
La Presidenta se ha referido también al saneamiento de las cuentas y ha recordado que si la tesorería en julio de 2015 era de 50 millones, en 2017 al cierre del ejercicio es de 631 millones. Unos datos que según Barkos “no son cuestión de azar, sino de responsabilidad política” y que responden a “una nunca cómoda pero necesaria reforma fiscal”, al trabajo realizado en torno a la actualización de la aportación de Navarra al Estado y a la renegociación de la deuda que ha ahorrado a las arcas forales 30 millones de euros en intereses de deuda. “Estos datos explican que hayamos podido consolidar 400 millones más al año en los presupuestos de Navarra que nos permiten sanear cuentas y revertir los recortes que hace bien poco se infligieron a la sociedad”, ha asegurado.
