El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, ha explicado hoy que el gobierno de Carles Puigdemont prevé convocar la votación del 1 de octubre apoyándose en la ley de referéndum que apruebe el Parlamento catalán, aunque el Tribunal Constitucional (TC) la suspenda.
Ayer, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, explicó que, si la Mesa del Parlament admite a trámite la proposición de ley de referéndum registrada por Junts pel Sí (JxSí) y la CUP, el Ejecutivo la recurrirá inmediatamente, porque representa «una nueva patada al sistema democrático».
Rull afirma que, para esta maniobra, a la Generalidad le asisten dos derechos reconocidos internacionalmente: el principio democrático, que reconoce el referéndum como una operación democrática, y el derecho a de excepción, que les permite sortear al TC, a su juicio.