Últimas noticias

El contraste extremo del turismo: ¿fuente de riqueza o cultivo de pobreza?

Las visitas a nuestro país y el dinero que se dejan los turistas bate récords.

Mientras, colectivos de ultraizquierda tratan de boicotear al sector, alegando que la clase trabajadora se ve perjudicada.

El turismo extranjero gastó en España durante el primer semestre más de 37.000 millones de euros, pero es ya el principal problema para los barceloneses. Es un sector que representa el 10 por ciento del PIB nacional, y sin embargo, puede descomponer barrios como la Parte Vieja de San Sebastián.

Fuente de riqueza o campo de cultivo para la pobreza. Éxito económico, salvavidas de la crisis, potencia internacional o fracaso laboral, perpetuación de la precariedad y mala imagen en el exterior. Modernización urbanística o degradación de la ciudad.

En este contraste extremo se mueve ahora el turismo en España y lógicamente ha estallado una polémica que la clase política ya no puede evitar.

España acabó 2016 con una cifra récord de visitas turísticas de extranjeros, cerca de 76 millones.

La Alianza para la Excelencia Turística, Exceltur, auguró a mediados de julio que este año se superará la cifra gracias al «aluvión de viajeros» y a una campaña que se está comportando de manera «extraordinaria».

El INE confirmó las previsiones: según su encuesta de gasto turístico, los extranjeros han dejado en España, al cabo del primer semestre, más de 37.200 millones de euros, una cantidad sin precedentes.

Es casi un 15% más que lo que se gastaron el año pasado, que ya fue un ejercicio «sin precedentes». Los números que suelta el turismo se quedan anticuados en cuestión de meses, como si fueran fichajes de fútbol. Cataluña tiene más visitantes que nunca, al País Vasco va más gente que nunca y la Comunitat Valenciana ha situado la ocupación hotelera del mes de agosto en más de un 84%, otro dato sin parangón.

El turismo abarca el 10% del PIB nacional (amenaza con abarcar más) y da trabajo a más de dos millones de personas (y puede dar trabajo a más). Los números turísticos se han batido ferozmente unos a otros sin detenerse en algunas señales de alarma, como el turismo de borrachera (y de otras cosas) de Magaluf o Salou, o la saturación de pisos turísticos en ciudades como Barcelona o Palma.

Pero el pasado día 27 en Barcelona, cerca del estadio Nou Camp, cuatro encapuchados asaltaron un autobús turístico, pincharon una rueda y pintaron en la parte delantera, en catalán, «el turismo mata los barrios».

La acción no era aislada, porque desde hacía días se estaban registrando sabotajes en servicios de alquiler de bicicletas o de consigna de maletas, pero fue el que encendió la bocina y la puso a sonar. Se relacionaron y se relacionan estos hechos con grupos de extrema izquierda, algo que están confirmando sus propios autores.

La CUP, implicada

La entidad Endavant, integrada en la CUP, se ha atribuido actos como los descritos en el distrito de Ciutat Vella, en Barcelona, y la organización juvenil Arran Jovent, también vinculada a la CUP, colgó en su perfil de Twitter un vídeo sobre un sabotaje similar que hicieron días atrás en el muelle viejo de Palma.

Y lanzaron este mensaje: «Paremos el turismo masivo que destruye Mallorca y que condena a la clase trabajadora de los Países Catalanes a la miseria».

Asimismo, la organización de jóvenes de Sortu, Ernai, ha convocado para el próximo día 17, en plenas fiestas de la Semana Grande de San Sebastián, una manifestación contra el modelo de turismo de la ciudad.

No es una protesta hecha en solitario, ya que recientemente la asociación de vecinos de la Parte Vieja de la ciudad ha publicado un manifiesto en el que denuncian «la sobreexplotación mercantil» de la zona y acusan de la degradación que perciben a «la primacía económica» de la industria del turismo, que «arrasa con todo».

Toda la clase política, desde el presidente, Mariano Rajoy, y alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a los partidos, la FEMP, los sindicatos y presidentes autonómicos como Cristina Cifuentes o Ximo Puig, ha sido unánime en la condena de los actos violentos que han puesto el debate sobre el turismo en el centro del incendio político y mediático.

Pero cuando se apague el fuego, el debate quedará. Redistribuir la riqueza que genera esta industria y dar prioridad a que se haga del turismo un modelo sostenible y respetuoso con el medio ambiente o los derechos laborales son soluciones que ya están en la mesa.

Mientras tanto, el turismo seguirá batiendo récords. EFE

Buscar el turismo más barato en internet, a veces, no es lo más aconsejable

El turismo científico en España, con potencial pero aún sin despegar

Navarra entre las comunidades españolas con menos turismo internacional

About The Author

Otras noticias publicadas

Responder

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies