La vicepresidenta de Castilla y León, Rosa Valdeón (PP), ha asumido como «un error» y «una imprudencia» el haber triplicado ayer la tasa de alcoholemia cuando conducía por la N-122, en la provincia de Zamora, que ha achacado a la medicación y cansancio, ya que había bebido dos cervezas.
Ha explicado que no decidirá sobre su futuro político hasta hablar hoy con el presidente del Gobierno autonómico, Juan Vicente Herrera.
Tras pedir disculpas por lo sucedido, Valdeón ha sostenido en una rueda de prensa celebrada hoy en la sede de la Junta de Castilla y León, en Valladolid, que ya tiene la decisión tomada sobre si dimitirá o no, aunque primero debe hablar con Herrera, si bien ha insistido en que va a ser «coherente» con su trayectoria y con lo que ha dicho siempre sobre el comportamiento de los políticos.
Valdeón triplicó ayer por la tarde, en la carretera N-122 en Morales de Toro (Zamora), la tasa de alcohol permitida por el reglamento de tráfico, lo que ha achacado a que había tomado un ansiolítico, había dormido muy poco, ya que había llevado a sus hijos a Barajas (Madrid) de madrugada.
A la vuelta, ha explicado, tomó un bocadillo pequeño y dos cervezas, sin que fuera consciente de haber golpeado a un camión, en un primer incidente, en un adelantamiento en la A-6 en el término municipal de Espinosa de los Monteros (Ávila), como denunció un camionero.
La vicepresidenta autonómica ha manifestado que en el caso de haber sido consciente de esto, habría parado.
La vicepresidenta de Castilla León (PP) triplica la tasa de alcohol