Maite Esporrín, portavoz del PSN en el Ayuntamiento de Pamplona
Navarrainformacion.es
La portavoz del PSN en el Ayuntamiento de Pamplona, Maite Esporrín, ha destacado la «mala gestión, opacidad y amiguismo» en el balance político del año de gobierno del «cuatripartito»
Esporrin ha hecho referencia a la «mala gestión en asuntos municipales» tales como: el «caos sin precentes con los cambios de modelo lingüístico en Escuelas Infatiles»; la «falta implicación del alcalde, solicitada por los socialistas, en la resolución del asentamiento chabolista de Santa Mª la Real» o el consentimiento del ayuntamiento de Pamplona en el «desmantelamiento de las Escuelas Taller» que está llevando a cabo el gobierno de Navarra.
La portavoz socialista, en el balance, ha traducido la gestión del equipo de Asirón en Pamplona como una «gestión diaria que se caracteriza por la opacidad y el amiguismo». «El cuatripartito está volcado en favorecer a sus colectivos afines. El mejor ejemplo es la adjudicación de 130.000€ a la entidad que preside la hermana de la concejala Berro motivo por el cual hemos pedido su dimisión», ha especificado.
«En la misma línea, no se ha aclarado el supuesto trato de favor a la concejala Beloki al no ser sometida a la prueba de la etilometría como ocurre en la mayoría de los accidentes» o la «entrega que Asiron va a hacer del Chalet de Caparroso a los okupas del edificio de la calle Compañía», ha referido Esporrín.
Ademas, la portavoz socialista, ha destacado el «incremento de más de 70 personas en la plantilla municipal no se está haciendo en base a nuevos servicios, sino con un criterio claramente de amiguismo político y con un perfil lingüistico desproporcionado a favor del euskera».
En el balance del año de «cuatripartito» denuncia, así mismo, la «paralización de proyectos de ciudad» con la consiguiente «pérdida de oportunidades» como ha sido «el Tren de Alta Prestaciones».
Ha destacado, también, la falta de información en temas de interés general para Pamplona, la paralización de proyectos (ascensor de Mendillorri) y los desequilibrios urbanísticos y sociales existentes entre los barrios.
Por último, se ha referido a los asuntos institucionales con los que Asirón y el cuatripartito «gobiernan para sus colectivos, y de una manera sectaria». Así, ha destacado, entre otros: colocar la ikurriña en el balcón en San Fermín y en fiestas de los barrios, intento de prohibición de una exposición en la Ciudadela a la labor de la Policía Nacional, el abrazo de Asiron a Otegui, defensa y amparo de miembros de Ekin.
«De ineficaz, decepcionante, sectaria y pérdida de oportunidades y nuevos proyectos para Pamplona podemos calificar la gestión de Asirón y el cuatripartito en el Ayuntamiento durante este año», ha concluido Maite Esporrín.
