

El Consejo de Administración de Repsol ha acordado la adquisición de la totalidad del capital social de la petrolera canadiense Talisman Energy por 10.400 millones de euros, ha informado este martes la petrolera española a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Repsol pagará 8.300 millones de dólares (6.640 millones de euros) y asumirá una deuda de 4.700 millones de dólares (3.760 millones de euros). Explica que esa cantidad «se financiará con caja propia, fundamentalmente obtenida de la recuperación de valor de YPF tras su expropiación (6.300 millones de dólares), junto con otras fuentes de liquidez de las que dispone la compañía».
Se trata de la mayor operación internacional realizada por una empresa española en los últimos cinco años, según el grupo presidido por Antonio Brufau, que se situará así entre las 15 compañías petroleras privadas más importantes del mundo, con presencia en más de 50 países y con más de 27.000 empleados.
El acuerdo con Talisman supone el pago a sus accionistas de 8 dólares (6,4 euros) por cada acción, lo que representa una prima del 24% sobre la cotización media de los últimos tres meses.
La producción del grupo aumentará un 76%
La empresa española asegura que la compra de Talisman «aportará a Repsol activos en producción de primera calidad y áreas de gran potencial exploratorio en Norteamérica (Canadá y Estados Unidos) y el Sudeste Asiático (Indonesia, Malasia y Vietnam), así como en Colombia y Noruega, entre otros países».
Con esta adquisición, Repsol calcula que su producción de hidrocarburos aumentará un 76%, hasta los 680.000 barriles equivalentes de petróleo al día (bep/d), e incrementará su volumen de reservas un 55%, al superar los 2.300 millones de barriles equivalentes de petróleo. «Una vez culminada la operación, Norteamérica aumentará su peso en la compañía, al suponer casi el 50% del capital empleado en el área de exploración de hidrocarburos de la compañía», asegura el comunicado, donde se señala que el capital para América Latina será del 22%.
Además, el conjunto de las actividades de exploración y producción (Upstream) pasará a absorber el 56% del capital empleado por Repsol, frente al 35% que suponía hasta ahora.
Según la estimación de ambas empresas, la gestión conjunta de activos supondrá un ahorro de más de 200 millones de dólares (160 millones de euros) al año, «fundamentalmente por la optimización de funciones, gestión del portafolio de negocios y exploración, una mayor capacidad de comercialización en Norteamérica y la aplicación de tecnología y mejores prácticas operativas». Según el comunicado, «la operación ha sido unánimemente aprobada y valorada de forma favorable tanto por el consejo de administración de Talisman como por el consejo de administración de Repsol».
El cierre de la operación -previsto para mediados del año que viene- está sujeto a la autorización de la autoridad gubernamental en materia de inversiones extranjeras (Investmente Canada) y de los accionistas de Talisman, que están convocados a una junta extraordinaria el próximo 19 de febrero. Además, la sede de Talisman, la ciudad canadiense de Calgary, se convertirá en «uno de los grandes centros corporativos de Repsol fuera de España».
La petrolera española señala que va a continuar su estrategia en el país norteamericano, donde posee activos de gas y petróleo «de gran calidad» y donde ha realizado «importantes inversiones» en actividades en la costa este del país. Además, Repsol es el socio mayoritario en la planta de Canaport LNG en la localidad de New Brunswick.
El acuerdo contiene las cláusulas «habituales en este tipo de operaciones», según Repsol, que menciona que el consejo de administración de Talisman se compromete a no buscar activamente otros posibles compradores, mientras que la española se compromete a igualar ofertas superiores “no solicitadas”. Además, los consejeros y ejecutivos de Talisman no venderán sus acciones y votarán a favor del acuerdo. Por último, la compañía canadiense asume el compromiso de pagar a Repsol un importe de 270 millones de dólares «en determinadas circunstancias si finalmente no se cerrara la transacción».