El Índice de Precios de Consumo (IPC) retrocedió un 0,9% en julio respecto al mes de junio, al tiempo que recortó cuatro décimas su tasa interanual, hasta el -0,3%, debido al descenso del recibo de la luz, alimentos, el ocio y la cultura, y también por la menor inflación del transporte y la gasolina, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirma así el dato avanzado a finales del mes pasado.
De esta forma, el IPC interanual vuelve a entrar en negativo después de tres meses encadenando tasas positivas. Es la tercera vez en diez meses en que los precios muestran tasas interanuales negativas, aunque la de este mes de julio es mayor a las observadas en octubre de 2013 y marzo de este año (-0,1% en ambos casos).
Estadística ha atribuido el recorte interanual del IPC en julio a la evolución del transporte, que presenta una tasa del 0,1%, un punto inferior a la del mes anterior, debido a la estabilidad de los precios de los carburantes y lubricantes, frente al aumento registrado en julio de 2013.
También contribuyó a la bajada interanual del IPC el grupo de vivienda, con una variación del 1,2%, nueve décimas por debajo de la registrada en junio, como consecuencia de la disminución de los precios de la electricidad. También influyó el mantenimiento de los precios del gasóleo para calefacción frente a la subida registrada en julio del pasado año.
En el acumulado del año, el IPC registra una tasa del -1,2%, mientras que en tasa mensual (julio sobre junio), los precios descendieron un 0,9%, frente al estancamiento registrado en mayo y junio y la subida del 0,9% experimentada en abril.