

La renuncia al trono de Don Juan Carlos se produce tras años de progresivo declive de su valoración en las encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) hasta el punto que desde octubre de 2011 su nota se mantiene por debajo del aprobado
A mitad de los años noventa la Monarquía encarnada por Don Juan Carlos recibía una calificación de ‘notable’ (en torno al 7). Con los años su nota fue cayendo paulatinamente al 6 y al 5 en los comienzos del siglo XXI.
Pero en la encuesta de octubre de 2011, en medio de la crisis económica que afectó a todos los estamentos políticos, la valoración del Rey cayó por primera vez por debajo del aprobado con una nota de 4,89 puntos y, dos años después, en abril de 2013, después de episodios como la cacería de elefantes en Botswana o el ‘caso Urdangarín’, la Monarquía alcanzó su mínimo histórico con una nota de 3,68 puntos.
En la última encuesta del CIS en la que se preguntó a los ciudadanos por la Monarquía y el resto de instituciones fue en abril de este año y, por primera vez, su nota remontó, aunque sólo cuatro centésimas, para obtener una calificación de 3,72 puntos. Teniendo en cuenta que según informaciones oficiales el Rey venía preparando su abdicación desde enero de este año y en marzo informó de ello a Rajoy.