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Educación se plantea si seguir evaluando centros PAI o esperar curso 2020-21

Educación no ve diferencias “estadísticamente significativas” respecto a años anteriores en los resultados de la tercera Evaluación de Competencias y Destrezas realizada el curso 17-18 en centros PAI, por lo que se plantea si sería conveniente continuar realizándola el año que viene o esperar al curso 2020-2021 para “ver un cambio en la población”.

Así lo ha manifestado el director general de Educación, Roberto Pérez Elorza, en comisión parlamentaria, donde ha comparecido junto a la consejera María Solana para presentar el Informe de la Evaluación de Competencias y Destrezas del alumnado de 6º de Primaria, realizado durante el curso 2017-2018 a 647 alumnos distribuidos en 15 centros con Programa de Aprendizaje de Inglés (PAI).

Dicho informe establece la comprensión escrita como mejor competencia del alumnado evaluado (con un 73% de estudiantes que superan el nivel A1 en esta destreza), seguida por la expresión oral (64%), la comprensión oral (62%) y por último, con un cierto “margen de mejora”, la expresión escrita, con un 43% de alumnos que superan este nivel.

Elorza, que ha destacado que no existen diferencias “estadísticamente significativas” respecto a los resultados obtenidos los dos años previos, ha apostado por “valorar si después de estos tres años sería conveniente hacer otra evaluación el curso que viene o esperar un periodo de tiempo para ver un cambio en la población”.

En esta misma línea, la consejera Solana ha compartido que “tal vez no tenga demasiado sentido proseguir con una evaluación de estas características los próximos cursos”. Sin embargo, ha abogado por realizar un estudio con una muestra espejo, comparando los centros PAI con otros que no lo son e incluyendo competencias científicas.

Según ha recordado, de 2011 a 2015 se produce “una implantación descontrolada, sin rigor y sin seguimiento necesario”, por lo que “el gran boom del PAI” no llegará a 6º de Primaria hasta los cursos 2020-2021 y 2021-2022.

“Por eso es importante prestar especial atención a los centros que implantaron el PAI en aquellas condiciones”, ha añadido, tras lamentar que “fueron muchos los centros que, con informes negativos, entraron a PAI”.

El regionalista Alberto Catalán ha indicado que “se ha demostrado fehacientemente que el Gobierno no tenía ningún tipo de razón a la hora de establecer estas evaluaciones”.

“Con la intervención tanto del director general como de la consejera se ha demostrado palpablemente que esas evaluaciones eran innecesarias y obedecían única y exclusivamente a un criterio político y partidista: el acoso y derribo al PAI”, ha dicho, tras subrayar que los datos de esta tercera evaluación “vienen a demostrar lo que ya se sabía, que el PAI funciona y los resultados son satisfactorios”.

Por el contrario, Isabel Aranburu, de Geroa Bai, se ha posicionado en contra de lo expuesto por el regionalista al afirmar que es “muy oportuna” la evaluación realizada. “Nos parece irresponsable, y hasta temeraria, la posición de UPN en contra de la evaluación de un programa”, ha reivindicado, al igual que la parlamentaria de EH Bildu Esther Korres, que ha calificado como “sorprendente” que se “niegue la necesidad de cualquier evaluación”.

“No lo podemos entender de ninguna de las maneras, a no ser que se tenga miedo de los resultados”, ha señalado, tras destacar que “el fracaso del PAI es evidente” porque está teniendo unos resultados “muy modestos” que no se pueden “justificar”. Así, ha valorado positivamente la realización de una prueba espejo, porque esta “ofrecerá una lectura verdadera”.

Asimismo, el miembro de Podemos Ahal Dugu–Orain Bai Carlos Couso ha considerado que “de alguna manera u otra” sí que hay que tener “bajo control todos los sistemas educativos” que estén en marcha.

Tras considerar que el departamento realiza una evaluación “que se ajusta a sus deseos y totalmente arbitraria”, el socialista Carlos Gimeno ha querido poner en valor que “no se va nadie” del PAI. “A pesar de que ‘ha fracasado’, como dice EH Bildu, nadie abandona el programa –ha explicado-, si yo fuera un evaluador tendría en cuenta estos datos”.

También el popular Javier García ha coincidido en que los integrantes del cuatripartito “se mueven por intereses partidistas e ideológicos” porque nunca se ha planteado “una evaluación a cualquier otro tipo de modelo”.

“Si tan importante es, que planteen también una evaluación a otros modelos que parece ser que ellos tanto defienden”, ha propuesto, tras apostillar que “aunque quieran hacer ver lo contrario”, los datos aportados “consolidan el buen funcionamiento del PAI”.

Marisa de Simón, de IE, que ha negado tener una actitud “interesada”, ha compartido la necesidad de realizar una evaluación comparativa respecto a otros centros que no han desarrollado este programa. EFE

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