El organismo encargado de los archivos subió a internet miles de documentos para ser consultados.
Según las últimas cifras oficiales, más de dos décadas después de la apertura al público de los archivos, más de 5.000 ciudadanos siguen solicitando acceso a los posibles documentos almacenados con su nombre.
Cuando se cumplen 25 años del asalto ciudadano a la central de la Stasi, la temida policía secreta de la República Democrática Alemania (RDA), más de 5.000 personas siguen solicitando cada mes tener acceso a las actas que se pudieron redactar sobre ellos y su vida íntima y cotidiana.
La antigua sede del Ministerio para la Seguridad del Estado de la RDA, en el barrio berlinés de Lichtenberg, mantiene hoy sus puertas abiertas para recordar a los miles de manifestantes germano orientales que en la noche del 15 de enero de 1990, dos meses después de la caída del muro, tomaron al asalto el complejo.
Los manifestantes, enfurecidos, no entendían que los funcionarios siguieran trabajando en las instalaciones y hoy se honra a esos berlineses por haber logrado evitar que el régimen continuara a puerta cerrada destruyendo las millones de actas acumuladas durante décadas.
La Stasi revela sus secretos por la red
El organismo encargado de administrar las actas de la Stasi presentó una mediateca en internet que permite libre acceso a miles de documentos internos de la célebre y temible policía secreta de la extinta República Democrática Alemana comunista (RDA).
La web recoge dos mil 500 páginas de documentos, 250 imágenes, seis horas de grabación y 15 horas de filmaciones que permiten asomarse a las entrañas del organismo y conocer los métodos con los que vigilaba cada aspecto de la vida pública y privada en la RDA.
Entre los documentos figura una grabación de una hora y media en la que el entonces jefe de la Stasi, Erich Mielke, explica cómo se debe actuar contra los ciudadanos que quieren abandonar la RDA.
También los dibujos confiscados a un prisionero, una carta en la que una estudiante habla sobre su posible fuga a occidente, un acta sobre el concierto del rockero Udo Lindenberg y diversos panfletos.
El archivo también ofrece material de primera mano sobre hechos históricos como el levantamiento popular del 17 de junio de 1953 o la llamada “revolución pacífica” que terminó precipitando la caída del Muro de Berlín en 1989.
La Stasi fue creada en 1950, un año después de la fundación de la RDA, y vigiló a la población hasta el final del régimen gracias a una masiva red de decenas de miles de colaboradores e informantes. Uno de ellos fue retratado en la oscarizada película La vida de los otros.
Con la reunificación alemana en 1990, el gobierno creó una agencia para administrar y hacer público el acceso a los millones de actas personales acumuladas durante décadas por el organismo. La nueva mediateca digital no incluye el acceso a esas actas.
Larga espera
En el centro de documentación de la Stasi se acumulan las solicitudes de alemanes que quieren ver las actas que las autoridades rellenaron sobre ellos.
“En algunos casos deben esperar hasta tres años para poder mirar los documentos que había sobre ellos en el Ministerio de Seguridad de la Stasi en la RDA”, informó el responsable de los documentos de la Stasi, Roland Jahn.
“Nos esforzamos mucho para que las actas estén a disposición de todo el mundo. Sin embargo, lidiamos con una gran montaña de documentos”, indicó.
En 2014 se recibieron 61 mil solicitudes
Veinticinco años después de la caída del Muro de Berlín, el 9 de noviembre de 1989, muchos alemanes siguen queriendo ver el material recopilado por la Stasi a través de escuchas o informantes de todo tipo. En 2014 se recibieron 61 mil solicitudes.
Según las últimas cifras oficiales, más de dos décadas después de la apertura al público de los archivos, más de 5.000 ciudadanos siguen solicitando acceso a los posibles documentos almacenados con su nombre.
En 1991 se aprobó la ley que regula el acceso a los archivos y, desde entonces, cerca de tres millones de personas han solicitado acceder a sus actas.
